Descubrir mi pasión puede que sea una de las cosas que más me ha costado. Desde que empecé a trabajar en Barcelona, leía libros que me ayudasen en ese camino. Se convirtió en una obsesión. También, me provocó momentos de mucha frustración.

Sí, me divertía en mi trabajo. Al mismo tiempo, no obstante, intuía que había algo más pero no sabía qué era. Y eso me carcomía. En esos momentos de duda, me forzaba a estar bien, agradecer tener un trabajo y una empresa propios. Aunque, secretamente, soñaba con hacer algo que me saliese natural. A veces, temía no tener ese algo innato.

Descubrir mi pasión
Foto de Randalyn Hill en Unsplash

En el libro, ‘Encuentra tu Elemento’, Sir Ken Robinson habla sobre la pasión en estos términos:

Pasión significa hoy día una intensa atracción personal por algo, una estrecha afinidad o entusiasmo que puede desembocar en un profundo gozo y plenitud. La pasión es una de las modalidades del amor, razón por la cual la gente que está en su Elemento afirma a menudo que ama lo que hace.

Soy un firme convencido de que todos tenemos talentos únicos que podemos expresar. Trabajando en algo que no nos llena, lo reprimimos. ¿Pero qué es algo que te apasiona? ¿Cómo descubrirlo?

¿Cómo descubrir mi pasión?

No es fácil, la verdad. Una de las maneras más efectivas es probar. Cuando pruebas, tienes información. Hasta entonces, todo estará en tu cabeza. Tus dudas y tus miedos. Para empezar a probar, puedes hacerte esta serie de preguntas:

Yo me he dedicado a muchas cosas hasta llegar a darme cuenta que lo que me encanta y me da energía es conectar con otras personas y ayudarles a mejorar sus vidas. Si no empiezas a andar el camino, todo serán dudas.

La magia del primer paso

Cuando das el primer paso, sucede algo mágico. Empiezas a tener más claridad. Se presentan oportunidades. Conforme vas avanzando, eliminas cosas que pensabas que te podían gustar. Apuestas el doble por otras que te llenan de energía. Esa es la clave aquí. Cuando te dedicas a algo que te apasiona, no te supone prácticamente esfuerzo hacerlo. Ese acto te recarga.

En palabras de Ken Robinson:

Mi abuelo tiene ahora ochenta y dos años y aún sale al campo. ¡Ochenta y dos! Llueva, nieve, haga viento o granice, con sus dos rodillas de titanio, sus dos caderas de titanio ¡y a la espera de dos hombros de titanio! ¿Está loco? ¿Ha perdido la chaveta? No. Es parte de su vida y de su identidad, y dejarlo sería perder una parte de sí mismo.

La clave está en que encontrar tu Elemento y acomodarte en él significa conectarte a tu propia energía espiritual.

Como ves, descubrir mi pasión no ha sido algo fácil. Es un camino duro. De altos y bajos. Pero que merece mucho la pena. No se acabarán las dificultades, pero tendrás más energía para afrontarlas.

Por eso, hoy agradezco no haber desistido nunca en este empeño. Haber superado las adversidades y los temores. Para así poder haber llegado donde he llegado hoy en día.

PD: Si te encuentras en una situación como la que yo me encontré y no sabes qué camino seguir, puedes ir aquí y contarme tu situación.

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